¿Podría el 11-S haber sido evitado? ¿Fueron los servicios de inteligencia negligentes? 17 años después de que dos aviones suicidas se estrellasen contra las Torres Gemelas y llenasen el corazón de Nueva York de ceniza y ruinas, los interrogantes vuelven a la televisión. Esa es la intención de The Looming Tower, serie estrenada ayer en la Berlinale, un retrato sobre la falta de cooperación entre la CIA y el FBI durante la persecución de Al Qaeda en los años previos al ataque del 11-S. Su estreno en España llegará a través de la plataforma Amazon Prime Video el 9 de marzo. Mientras en 1998 EEUU vivía conmocionado el escándalo Lewinsky, los servicios de inteligencia se tiraban de los pelos por neutralizar la creciente amenaza de una guerrilla yihadista capitaneada por el multimillonario Osama Bin Laden.

Esa batalla enfrentó al director de la oficina antiterrorista del FBI, John O’Neil (Jeff Daniels), y a su homólogo en la CIA, Martin Schmidt (Peter Sarsgaard), quien decidió no revelar informaciones sobre los salafistas que después se probarían muy útiles.