"Mamá, deja de tocarme el pendiente, que me pones nerviosa", decía una niña en el vestíbulo de un hotel de Barcelona, donde la semana pasada A-3 hizo el casting de un programa para jóvenes talentos. Quiero cantar es el título del espacio, que debutará este trimestre.

La cola no era muy larga, y eso daba confianza a los candidatos. Pero cuando iban a actuar, el director del futuro show , Manuel Paino, les aseguraba que se habían presentado unos 150 niños. "¡Madre, mía!", exclamaban. "Pero si salgo por la tele ya estoy contenta", le confesaba una pequeña a su madre.

Este casting es la segunda etapa de un tour que arrancó en Andalucía y acabará en Madrid. En total, casi 2.000 niños pasarán las pruebas, pero solo entrarán 20. "Se buscan nuevos talentos, sobre todo pequeños. Pero al final solo ganará uno", afirmaba Paino, quien añadió que el espacio será "un espectáculo musical de seis entregas, con una gran puesta en escena y presentado por Jorge Fernández".

La más pequeña en la prueba, Camila, de 9 años, está custodiada por su familia. "En casa baila y canta todo el día, imita a Paulina Rubio y lo que le eches", decía su padre. La pequeña solo calla y tiembla. Eso sí, en cuanto le ponen el micro delante, saca un chorro de voz que deja boquiabiertos a todos. Al resto les esperaba un largo día. Una madre le daba un buen consejo a su hija: "Si después te dicen ´lo siento, no ha habido suerte´, no te deprimas".