El dictado oficial de Nielsen con las audiencias no llega hasta mañana. Sin embargo, nadie duda de que la sentencia será favorable al evaluar el estreno el viernes en EEUU de la segunda entrega de High school musical , el fenómeno televisivo con el que Disney Channel ha devuelto la vida a un género que llevaba en estado vegetativo desde Grease .

Aunque el instituto que da nombre al telefilme es una excusa (los jóvenes pasan la mayoría de los 120 minutos en las vacaciones de verano), no es muy arriesgado hacer la previsión del éxito de esta segunda parte: el tráiler en YouTube ya lo han visto casi un millón de personas. Y hay quien se atreve a estimar que, sumando las emisiones de la película del viernes, de ayer y de hoy, el total de audiencia puede alcanzar, o superar, los 25 millones de personas.

HA NACIDO UNA ESTRELLA

En Disney nadie quiere entrar en el juego de las expectativas y Patti McTeague, vicepresidenta de comunicación de la casa, ha esquivado las preguntas de los periodistas. Reconoció que la cadena tenía muchas opciones de mantenerse como líder de la tele de pago en horario de máxima audiencia por sexta semana consecutiva, pero aseguró que "eso está en manos de los niños".

No solo debería incluir a los niños y adolescentes, ya que los protagonistas del telefilme tienen cada vez más tirón entre los adultos. Por ejemplo, el actor principal de HSM-1 y HSM-2 , Zac Efron, ocupa la portada del último número de Rolling Stone , una revista no destinada habitualmente al público infantil ni juvenil. Como ha escrito Variety , "Efron podría ponerse frente a las cámaras leyendo el listín telefónico y millones de chicas se sentarían a verlo".

Disney también podrá contar entre su audiencia a infinidad de padres que han dejado de manifiesto su beneplácito a una pulcra serie (no se ve ni un beso, pese a que las historias de amor adolescente sean uno de los ejes) y que, además, en esta segunda entrega anima a los jóvenes a hacerse cargo de su futuro (muchos personajes trabajan en verano para empezar a ahorrar para la universidad).

HSM-2 habrá atrapado también a cualquier adulto interesado en estudiar y entender la tantas veces elusiva fórmula del éxito en televisión. Y, probablemente, a muchos que hayan leído las críticas de la película de Kenny Ortega en los principales medios de comunicación de EEUU.

Salvo The New York Times , que ha escrito que HSM-2 es "mediocre" y ha criticado desde el mal playback hasta el pobre rodaje de las escenas de baile, pasando por el excesivo bronceado artificial de los adolescentes, la bendición es generalizada. Variety , biblia de la industria del entretenimiento, asegura que la segunda parte "supera a la primera en energía pura y brío" y que "ofrece otra ristra de melodías pegadizas". Por su parte, Los Angeles Times ha afirmado contundentemente que HSM-2 "es aún mejor que la primera", y mantiene vivo "el milagro" de Disney, que ofrecerá la tercera parte de este fenómeno ya en el cine.