Nominado al Oscar por su papel de veterano del Vietnam en Forrest Gump y quizá el único actor que ha visitado Irak para llevar ayuda humanitaria y entretener a las tropas americanas, Gary Sinise encarna a un experto forense en CSI Nueva York, serie que hoy cierra en Tele 5 su primera entrega como la segunda serie extranjera más vista de la temporada (tras CSI Miami ), con una media de 3.836.000 espectadores y un 23,3% de cuota.

--Para un actor que tiene una carrera cinematográfica tan importante, ¿qué supone trabajar en televisión?

--Es un medio en el que he tenido muy buenas experiencias. Algunos de mis mejores trabajos han sido en televisión. Además, últimamente no me ofrecen papeles muy interesantes en el cine, y la televisión cada vez está mejor. Cuando leí el guión de la serie vi que estaba bien escrito y que se trataba de algo excelente. Y trabajar con un equipo tan extraordinario como el de esta serie estimula.

--¿Qué es lo que más le ha sorprendido al descubrir el mundo de los forenses?

--Que llegan a un punto en el que están tan saturados de todo que, o dejan la profesión antes de que ésta acabe con ellos o pasan de todo. Ya nada les afecta emocionalmente.

--¿Qué hace que CSI tenga tanto éxito?

--Creo que es su particular estilo. Esa faceta de Sherlock Holmes que tiene el argumento y, por supuesto, su excelente reparto. De niño siempre fui un fan de Holmes. Me interesaba saber cómo resolvía todos esos rompecabezas. A la gente le fascinan los pequeños detalles y, sobre todo, lo que tenga que ver con el mundo científico. Creo que todos los avances con el ADN y la sofisticación de la tecnología que se usa para resolver crímenes son muy atractivos.

--¿Pesa la ambientación tan tétrica y, a veces, deprimente?

--Debes tener un gran sentido del humor, porque hay cosas muy desagradables con las que trabajamos en muchas ocasiones. En cada episodio nos las vemos con la muerte, algunos son más ligeros que otros, pero siempre entras en ese mundo tenebroso. Soy actor dramático y me gustan las cosas complejas y de peso, pero de vez en cuando te va bien un cambio, hacer algo que no sea demasiado perturbador, en lo que no te involucres emocionalmente.

--Pero es un trabajo agradecido.

--Siempre le estoy agradecido a la vida por lo que me ha dado. Creo que he tenido mucha suerte: éxito en el trabajo, tengo una familia extraordinaria, vivo en un gran país. Espero que todo siga así por un tiempo.

--Y qué le ha llevado a Irak?

--El intentar ayudar a gente menos afortunada que yo. Creé el programa Operación Niños de Irak (www.operationiraqichildren. org). Es una labor humanitaria: visitamos las escuelas, sobre todo en las zonas más devastadas por la guerra, en las que desaparecieron, y llevamos material escolar y juguetes. Tratamos de restablecer las relaciones con el pueblo iraquí. Nuestros soldados reconstruyen escuelas y ayudan a los niños. En televisión sólo se ven las cosas malas que ocurren allí, pero también hay historias muy positivas.

CSI Nueva York. Tele 5, 23.00