La celebración del Día del orgullo LGTBI esta semana da pie para plantearse un maratoniano fin de semana ante una televisión de la que sentirse orgullos@. La denominada pequeña pantalla, en lo que va de siglo, y gracias sobre todo a la revolución que han significado las plataformas por streaming, ha dado una nueva visibilidad al movimiento LGTBI. Y sobre todo ha ayuda a la normalización de esta realidad social con producciones brillantes y de gran calidad.

Así, lo difícil no es encontrar series con temática LGTBI para disfrutar de un entretenido binge-watching (atracón de series), sino seleccionarlas. Es, por tanto, un decálogo de producciones que difícilmente satifará todos los gustos, pero sí presenta un amplio abanico de tramas sobre la realidad trans.

El primer intento oficial de normalización llegó a la pequeña pantalla hace casi medio siglo, cuando la serie de la cadena estadounidense CBS presentó un personaje gay en la serie All in the family (1971). Al año siguiente, Martin Sheen encarnó a un homosexual en el telefilme de la cadena ABC That certain summer, y en 1973 se emitió el primer reality con un hombre (real) que salía del armario en An American family, de la cadena pública PBS, de EEUU.