La Comisión Europea (CE) aprobó el jueves una ayuda de 150 millones de euros del Estado francés al conglomerado de la televisión pública, France Télévisions, durante el 2008, con el objetivo de reducir el volumen de anuncios publicitarios en sus emisiones.

La CE cree que la inyección financiera está justificada por el coste de las medidas que anunció el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para que, a partir del 1 de enero del 2008, la publicidad se vaya suprimiendo progresivamente de las cadenas públicas, hasta desaparecer por completo. La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, explicó que seguirá "de cerca los desarrollos en el mercado audiovisual francés y las iniciativas de reformar France Télévisions", y ha añadido que los 150 millones de euros permitirán "que el conglomerado pueda cumplir su función", según indicó en una nota.

Después de que el Gobierno francés anunciara su proyecto de reforma de la televisión pública, los ingresos de publicidad de France Télévisions disminuyeron.

La inyección financiera del Estado sirve para que las cadenas públicas puedan ofrecer programas de calidad.