A sus 11 años, Phil Roman salió del cine tan impactado tras ver Bambi que les dijo a sus padres que ya sabía qué quería ser de mayor: creador de dibujos animados. Hoy, seis décadas después, tiene la vitrina de su mansión de Hollywood llena de premios Emmy y es propietario y productor ejecutivo de la compañía que realiza la animación de Los Simpson .

Roman se encuentra en Europa para hablar de Els Gaudins , serie ambientada en el imaginario gaudidiano. Supervisa los guiones y firma la dirección del capítulo piloto. Sus consignas llegan, vía e-mail, desde el otro lado del Atlántico. La sede creativa de esta coproducción internacional, en la que participa TV-3, siempre ha estado en Barcelona.

¿Qué vio en ´Los Gaudins´?

--Los dibujos. Me enseñaron los bocetos que había hecho Cristina Moreno. Lo vi claro. Era un estilo diferente. Podía ser una buena serie y me subí a un avión rumbo a Barcelona.

¿Gusta Gaudí en EEUU?

--Mi intención es venderles Gaudins. Es tan imaginativa que sorprenderá. El reto fue crear unos personajes ambientados en el universo Gaudí cuando paradójicamente él jamás dibujó a un ser humano.

¿Cómo surgieron ´Los Simpson´?

--Como un miniespacio que se emitía en el show de Tracy Ullman. Fueron tan populares que eclipsaron al programa. Cuando se pensó en la serie, asumí la producción.

¿Cómo vencen al tiempo?

--Cuando un programa supera cinco años podemos hablar de milagro. No es posible imaginar a la Fox sin Los Simpson . La clave está en que hablan del mundo real y que el público los cree sus amigos, se identifican y evolucionan con ellos.

¿Se encarga personalmente de controlar la producción?

--Los Simpson crecieron demasiado. El presupuesto de un capítulo asciende a 700.000 euros, más los guiones y todo lo demás el precio final se dobla. Durante siete años me entregué. No me gusta trabajar con tantas personas. La serie sigue en mi compañía Film Roman, pero yo me dedico a otra rama, Phil Roman Entertainment, desde donde trabajo con los creadores, como Els Gaudins , y los vídeos sobre Kelly, la hermana de Barbie.

¿Qué tal el ordenador?

--No cambia nada, es una herramienta, un lápiz. Lo que importan son las ideas.