Las audiencias de televisión que se registraron el viernes permiten asegurar que prácticamente toda España estuvo al lado de las víctimas del salvaje atentado del 11-M, y en contra del terrorismo. A los 11 millones de personas que inundaron las calles en las manifestaciones por la paz, hay que sumar los más de nueve millones que siguieron las diferentes movilizaciones ciudadanas a través de la pequeña pantalla.

Según datos de las cadenas, durante las más de dos horas que las principales televisiones ofrecieron las manifestaciones, la audiencia fue del 86,4%. Es decir, nueve de cada 10 personas que de 18.45 a 21.00 horas estaba ante el televisor, seguía y compartía la multitudinaria repulsa contra la violencia.

Esta cifra, ya de por sí espectacular, se queda corta: no contempla las audiencias que tuvieron las muchas televisiones locales y de cable que siguieron las concentraciones, ni el seguimiento desde lugares públicos, centros de trabajos o bares.

Las retransmisiones más seguidas fueron las de las televisiones públicas, "algo habitual cuando se ofrecen acontecimientos de esta trascendencia", como reconoce un directivo de una cadena privada. Así, TVE-1 y el conjunto de las autonómicas fueron las que más audiencia congregaron, con cerca de seis millones de personas y el 56,2% de cuota de pantalla.