La joven intérprete italiana Cristiana Capotondi se enfrenta al reto de luchar contra el recuerdo que dejó la actriz Romy Schneider, allá por los años 50, interpretando a la emperatriz austrohúngara Sissi.

--¿No es demasiado alargada la sombra de Romy Schneider?

--No creo. Romy es mi actriz preferida e hizo un papel maravilloso y perfecto, pero en esta película hemos querido dar un paso más y ahondar en la parte política. La visión que damos es mucho más realista, si la comparamos con el cuento en el que ha quedado envuelto el personaje de Sissi. Estamos en el 2010 y se nota en todo: la fotografía, los vestidos...

--¿Y en qué se traduce esa vertiente política de la emperatriz?

--En su interés por los asuntos del imperio. Ella intenta ayudar a los estados que querían ser independientes, Italia y Hungría.

--O sea, que estamos ante la versión dura de este cuento de princesas. ¿No habrán investigado el lado oscuro de Sissi?

--No lo hemos hecho, porque es profundísimo. Si investigáramos demasiado, las estrellas tendrían menos encanto. Todos los mitos aparecen distorsionados respecto a la realidad. La versión de Romy encarna la época de los 50: el sueño de la felicidad, la superficialidad... La nuestra se hace hoy, y por eso es más heavy.

--¿No ve usted cierto paralelismo entre las figuras de Sissi y la británica Lady Di?

--En Italia me piden siempre que las compare, ya que Sissi fue también una princesa triste y murió joven. Estaba en contra de su suegra y tenía problemas para adaptarse a la vida de la corte de Viena. Pero hay diferencias: Sissi apoyó el imperio, y eso le da un papel importante en la historia que no tenía lady Diana Spencer.

--¿Se ve parecida a la actriz Romy Schneider?

--No. Lo que sí es cierto es que mi aspecto recuerda al de ella.

--¿Qué parte de la película le ha resultado más difícil rodar?

--El final, cuando Sissi salva el imperio austrohúngaro. Ahí tengo que parecer una especie de Angela Merkel cancillera del Gobierno alemán y traer a su casa resultados, mientras que la emperatriz Sissi continúa siendo muy femenina.

--¿Es verdad que usted soñaba con hacer de Sissi cuando solo tenía seis años?

--De niña me sentía como el hombre de mi familia. Siempre pensaba en Sissi, en que un hombre me descubriría aunque me gustase el deporte y vestir como un chico.

--¿Qué actor español le gusta más?

--Javier Bardem, pese al pelo que le pusieron los hermanos Cohen en No es un país para viejos.