"Vivimos una especie de Nochevieja con luz y calor, porque Soria da hoy la bienvenida a una nueva era, la de la televisión digital terrestre". Con estas palabras, y tras pulsar un gran botón rojo de un mando gigante, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, certificó ayer al mediodía el apagón analógico en Soria. Así, entre una lluvia de confeti y serpentinas en la plaza Mayor, la provincia menos poblada de España ha sido la primera en suspender las emisiones de tele en analógico y sustituirlas por la televisión digital terrestre (TDT). Ahora, cualquier soriano que no tenga televisor con TDT o un descodificador digital, solo verá un mensaje en la pantalla que le informará de que la programación está en la TDT, y un número de teléfono de información.

Además de asegurar una mayor oferta, Sebastián destacó que zonas de la provincia donde antes no se veía la tele por problemas geográficos, "podrán por fin tener acceso a una televisión de calidad y sin problemas técnicos". No obstante, el ministro hizo especial hincapié en que ponen los medios, "pero los avances dependen del sector audiovisual". Para el ministerio, la implantación de la TDT ha significado una inversión de unos 56 millones de euros, además de los 558 millones de que dispondrán las autonomías (en forma de créditos) para las infraestructuras necesarias.

Por otra parte, existen equipos de seguimiento que ratifican que las operadoras cumplen con los compromisos adquiridos con la concesión de licencias.