Las previsiones indican que más de diez millones de argentinos seguirán esta noche la final de Operación Triunfo 2, que emite la cadena Telefé. El dato sería intrascendente si no fuera porque este mismo programa tiene un éxito similar en los países árabes, en Africa y, dentro de pocos meses, en la India, donde se estrenará el próximo 15 de mayo. OT no sólo es el reality de más éxito a nivel mundial, sino el ejemplo más claro de que la globalización también ha llegado a la tele.

Pocos en Gestmusic pensaban que el concurso musical alcanzaría estas dimensiones, cuando TVE-1 estrenó, el 20 de octubre del 2001, la primera edición de Operación Triunfo. La realidad es que desde entonces no ha parado de crecer y lo ha hecho casi con la misma fuerza que ha languidecido en TVE, hasta el punto que la cadena pública ha renunciado a una cuarta edición y ha pasado el testigo a Tele 5.

EXITO ARABE

Primero, se expandió por Francia, Holanda y Portugal. El 27 de abril del 2002 saltó a Brasil, con el nombre de Fama . En septiembre de este mismo año recaló en Moscú, donde se emite el primer canal de la televisión rusa con el nombre de Fábrica de estrellas y ya preparan la sexta edición. Pero el salto realmente importante se produjo cuando la cadena libanesa LBCI compró el formato para su emisión en los países árabes, desde Marruecos hasta Yemen. La final de Star Academy congregó ante el televisor a 350 millones de personas, con una cuota de pantalla del 93,9%.

Algo parecido ha ocurrido en el continente africano, donde, en un hecho sin precedentes, Project Fame ha servido para enlazar Suráfrica con 10 países del sur del continente.

Ahora, los ojos de los responsables de Gestmusic-Endemol están puestos en Asia, como reconoce Toni Cruz, presidente de Endemol-España. En India, un subcontinente con 1.000 millones de personas, Kala Academy comenzará a rodar en mayo y ya han empezado las primeras prospecciones en Singapur, donde podría estrenarse en menos de un año, en China y Japón.

El presidente de Endemol-España reconoce que todos estos proyectos demuestran que "con la música se pueden conseguir cosas que serían imposibles de otra forma", pero descarta que el próximo paso sea un gran concurso a nivel mundial. "Podría ser espectacular, pero sería un poco aburrido".