Diversos expertos en el mundo de la televisión coinciden en que la llegada de la Televisión Digital Terrestre producirá una "crisis estructural" que significará una "quiebra del negocio tradicional", señaló ayer Eduardo García Matilla, presidente de Corporación Multimedia.
Este experto en el mundo audiovisual, acompañado del presidente de la Academia de Televisión, Manuel Campo Vidal, y del director de la Escuela de Organización Industrial, Alfonso González, presentó ayer el estudio La industria audiovisual en España. Escenarios de futuro .
Campo Vidal destacó que este trabajo pretende dibujar el mapa del sector audiovisual en el mismo momento en el que se produce el cambio definitivo de modelo "y hemos llegado a este punto sin que ninguna de las predicciones catastrofistas se haya cumplido", en plena crisis económica y con la desaparición de la publicidad en TVE.
La obra hace un recorrido por el estado del sector analizando la proliferación de canales con la implantación de la TDT, en qué se gastan el dinero las televisiones, el estado de las productoras, el nuevo perfil del espectador, el origen de los contenidos y el mercado publicitario, entre otros temas.
Cincuenta expertos en diferentes áreas del mundo de la televisión ha aportado sus puntos de vista a través de un cuestionario básico estructurado de temas comunes, entre el 15 de octubre del 2009 y el 10 de enero de 2010.
Eduardo García Matilla resaltó las principales conclusiones del estudio que, entre otros aspectos, señala que estos cambios que se están produciendo en el mundo audiovisual no son coyunturales, sino que se trata de un "cambio estructural".
Un cambio estructural provocado por la llegada de las nuevas tecnologías, que acarreará, a su vez, cambios sociales en los hábitos de consumo y una crisis en la eficacia publicitaria que va más allá de la crisis económica.
Los expertos consultados para realizar el trabajo son unánimes al señalar que este panorama se aclarará cuando llegue la segunda digitalización, con el despliegue definitivo de la banda ancha, mientras que la publicidad se aprovechará de la dispersión.
Las diferencias se encuentran entre quienes quieren acabar el proceso digital rápidamente y entre los que van con cautela, como es el caso de los empresarios, y miran con recelo como se puede producir este cambio. Para García Matilla, resulta difícil aventurar cómo será ese mundo digital, con una gran oferta de canales.
