Según los últimos datos facilitados por la Consejería de Sanidad, los extremeños tienen que esperar algo más de dos meses para ir a la primera visita con el especialista, cuatro meses y medio para operarse y casi tres para una prueba. En el último año, la demora sube dos días en consultas y baja un mes para pruebas y 10 días para quirófano. Al cierre del ejercicio 2016, eran 148.533 los extremeños que tenían pendiente una cita con el Servicio Extremeño de Salud (SES), 32.724 menos que hace un año. Pese a la reducción, el 52% (77.690 pacientes) supera los tiempos establecidos por la ley, un porcentaje que no obstante se ha rebajado en ocho puntos desde diciembre del 2015. También se reducen los usuarios sin cita detectados tras el cambio de gobierno, que pasan de los 96.461 de hace un año a 56.567 en la actualidad, un 41% menos.