Los accidentes de tráfico provocan, además de una irreparable pérdida de vidas humanas, un considerable coste económico en el sistema sanitario regional. Los últimos datos que maneja la Consejería de Sanidad, y que se refieren al año 2002, elevan este gasto a algo más de 227 millones de euros anuales, lo que ha llevado a la Junta a incluir como uno de los pilares del nuevo Plan de Salud un paquete de actuaciones en este sentido. El objetivo, reducir un 6% el número de víctimas mortales en sólo cuatro años.

El documento de debate que se está manejando para el futuro Plan de Salud 2005-2008 explica que en estos momentos la siniestralidad en la carretera es "la primera causa evitable de mortalidad", por el que este proyecto "prioriza la intervención para hacer frente a este importante problema sanitario y social". Se trata, añade, de "un problema de salud pública".

En el caso de Extremadura, se detecta desde 1993 "un incremento progresivo" tanto del número de accidentes como del número de víctimas, aunque este último guarismo registró un leve retroceso en el 2003. De esta forma, el año pasado hubo en la región 1.703 accidentes con víctimas en los que fallecieron 143 personas y resultaron heridas algo más de 2.000. Y es que no sólo se trata de la mayor causa de muerte no natural, sino que a esto se suma que suponen la primera causa de lesiones irreversibles de todo tipo.

EFECTOS De hecho, en España cada año se producen 40.000 traumatismos craneoencefálicos por esta causa, de los que el 5% desembocan en coma vegetativo y el 25% padecen lesiones medulares. El propio Ministerio de Sanidad apunta que el año pasado fueron atendidas 513 personas por lesiones traumáticas cerebrales y medulares tras sufrir un accidente.

A la hora de analizar las causas --claves para poder elaborar nuevas estrategias de prevención-- destacan tanto el consumo de bebidas alcohólicas como la conducción peligrosa entre los principales motivos.