Efectivos extremeños de la Policía Nacional y de la Guardia Civil refuerzan durante estos días el dispositivo de seguridad puesto en marcha en Madrid con motivo de la boda real. En torno a unos 70 agentes, entre ambos cuerpos, se encuentran desplazados a la capital madrileña para llevar a cabo tareas de control y vigilancia, a los que habría que unir los policías y guardias civiles que están destacados en los pasos fronterizos de Extremadura con Portugal.

Según los datos del Sindicato Unificado de Policía (SUP), "a los más de 40 destinados periódicamente en comisiones de servicios en Madrid, hay que unir los miembros de la Brigada de Información desplazados durante los dos últimos meses y algunos efectivos que han viajado en los últimos días para reforzar los servicios de vigilancia". Esta medida afecta a todas las comunidades autónomas, aunque para esta organización sindical resulta significativo que Interior la aplique en aquellas regiones en las que las plantillas policiales son deficitarias.

Por su parte, la Guardia Civil de Extremadura ha aportado también algunos agentes, sobre todo especializados en explosivos, así como algunos de los vehículos del destacamento de Tráfico en la comunidad autónoma, según datos de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC). El Ministerio del Interior tiene previsto dedicar a este evento un total de 17.500 miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, cifra que supera los 23.000 efectivos sumando los más de 3.000 policías en prácticas, 2.000 policías locales y un centenar de guardias reales. Habrá un centro de coordinación de Policía, otro de Guardia Civil y un tercero de Casa Real, que a su vez serán dirigidos desde la Secretaría de Estado de Seguridad.

CRITICAS Dentro del dispositivo de seguridad, los agentes de Guardia Civil, que participarán en la boda del príncipe Felipe y Letizia Ortiz mañana sábado, han mostrado su malestar porque no tendrán gratificación alguna por servicio extraordinario prestado, según informaron a Europa Press fuentes de AUGC.

Para que los agentes del instituto armado tengan derecho a cobrar 4,81 euros por hora extra prestada tienen que completar primero las 166 mensuales establecidas, es decir, tienen que trabajar las 37,5 horas semanales de todos los funcionarios y, a partir de ahí, se comenzarán a contabilizar las horas a razón de 800 pesetas cada una.

Por su parte, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que formen el dispositivo de la boda obtendrán el equivalente a un servicio y medio extraordinario, 90 euros. Una representación de la Dirección General de la Policía trasladó esta decisión el pasado lunes a los diferentes sindicatos policiales, que la tacharon de "insuficiente".