La sequía ha puesto nuevamente sobre la mesa el debate sobre los seguros agrarios. Mientras que el consejero de Agricultura, José Luis Quintana, ha vuelto a realizar una llamada a los agricultores para que contraten pólizas, los representantes de las organizaciones recelan de este sistema al considerar que no cubren todos los daños producidos. Quintana asegura que "la mayoría de los seguros agrarios llevan contempladas ayudas por la sequía; por eso, cuando técnicamente exista la sequía, los agricultores que hayan suscrito sus seguros agrarios recibirán las correspondientes indemnizaciones".
Esta opinión no es compartida por Bibiano Serrano (Apag), quien afirma que "hay seguros que cubren en parte la cosecha de este año pero hay pérdidas que no son asegurables". Pone como ejemplo el seguro integral de cereal, que sí incluye daños por sequía, aunque Apag estima que no llega a cubrir más de un 30% de la producción real de la explotación.
La Consejería de Agricultura incentiva con más de 7 millones de euros anuales la contratación de seguros por parte de agricultores y ganaderos como mecanismo de sostenimiento de sus rentas. Desde este departamento se insiste en que "técnicamente no se puede hablar de sequía" y se resta importancia a los efectos de la falta de precipitaciones.
La Consejería de Agricultura recuerda que el seguro de pastos para el ganado se puede contratar hasta el próximo 28 de febrero y que con su contratación los agricultores y ganaderos están a tiempo de resolver el problema. Este departamento también recuerda que la Unión Europea no permite a las administraciones establecer ayudas a sectores que son asegurables. No obstante, asegura que si se declara la situación de sequía ya serán otros mecanismos los que se puedan poner en marcha.
