Los agricultores extremeños han frenado el consumo de agua en sus explotaciones. Durante el año 2004, último analizado por el INE, los profesionales del campo gastaron un 3,5% menos que en el ejercicio anterior, pasando de 1.469 millones de litros en el 2003 a los 1.417 millones del 2004, mientras que España, el consumo en el campo ascendió una media del 1,4%. El cultivo que más consumo presenta son los herbáceos, con 850.000 millones de litros. En cuanto a las técnicas de riego, priman las de gravedad, que suponen más de 908.000 millones de litros, muy por encima de los sistemas de riego por aspersión o por goteo.

A este respecto, José Cruz, responsable de la organización agraria UPA-UCE, explicó ayer que el recorte generalizado se debe precisamente a que cada vez más se utilizan sistemas de riego menos derrochadores, como el de goteo (sobre todo en los frutales), además de que los agricultores hacen un "uso más racional del agua".

La mejora en los planes de regadío y la mejora en la red de acequias y canales son otros motivos de la reducción del consumo en la agricultura, según comentó Cruz.

Según la encuesta del uso del agua en el sector agrario, el consumo de las explotaciones agrarias ascendió en el año 2004 en España a 17.808 hectómetros cúbicos de agua, lo que supone un incremento del 1,4% respecto al año 2003.

Por comunidades autónomas, Andalucía fue la que más agua consumió (el 25,1% del total), seguida de Aragón (9,6%) y de Navarra (9,5%).