Las novedades del Proyecto de Ley de Medidas Tributarias y Administrativas, complementario a los Presupuestos Generales de Extremadura para el 2011, prevén aumentar la recaudación por impuestos en 33,7 millones de euros para hacer frente a la crisis. Así lo manifestó ayer el consejero de Administración Pública y Hacienda, Angel Franco, en el pleno de la Asamblea, en el que defendió el texto, que seguirá su tramitación en la Cámara sin el apoyo del PP.
Según los datos proporcionados por el consejero, La Ley de Medidas Tributarias, que entrará en vigor el uno de enero, contempla, de acuerdo con las imposiciones del Ejecutivo nacional, "aumentar la recaudación de la región para adaptarse a la actual coyuntura económica, de tal forma que los mayores recursos sean aportados por los contribuyentes que más tienen".
Así, la futura ley, además de contemplar la creación de nuevas tasas como el denominado céntimo sanitario --al que se opone frontalmente el PP regional-- también contempla un nuevo Sistema de Financiación Autonómica, de acuerdo a las directrices del Gobierno central.
Esta permitirá que los ingresos tributarios de la región alcancen los 1.769,1 millones de euros, 515,4 más que en este ejercicio (41,1%). Para alcanzar esta cantidad, se establece un aumento del 40% en los impuestos directos --IRPF, Sucesiones y Donaciones, Depósitos en Entidades de Crédito, etc.--, que alcanzarán los 638 millones de euros, y del 50,6% en los indirectos --IVA, Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos, etc.--, que llegarán hasta los 1.011. Los 118 restantes, pertenecen a otras tasas y precios públicos que sin embargo, se reducen un 6,2%.
NUEVAS MEDIDAS El consejero también explicó las nuevas medidas que contempla el texto y que en total, supondrán 33,7 millones de euros más para las arcas públicas regionales.
Entre ellas, destaca sobre todo el céntimo sanitario, un impuesto que encarecerá el litro de gasolina 2,4 céntimos (2 en el caso del gasóleo) para destinarlo a la Sanidad. También el aumento en los tramos regionales del IRPF, con incrementos que serán de medio punto para las rentas superiores a los 60.000 euros; de un punto para las que sobrepasan los 80.000 euros; de dos puntos para las de más de 100.000 euros y de tres para las que superan los 120.000.
Frente a los incrementos, Franco también destacó las nuevas deducciones en la cuota íntegra del IRPF a favor de las mujeres y los jóvenes emprendedores, o de quienes acometan obras de mejora en su vivenda habitual.
REACCIONES La ley de medidas tributarias entró ayer en la Asamblea de Extremadura, donde superó el debate de totalidad con el voto en contra del PP, que duda de la legalidad de alguna de las medidas que contempla, como el céntimo sanitario.
Así, la diputada popular Cristina Teniente señaló que su grupo votaría en contra del texto porque "genera incertidumbres, va a la desesperada y es cortoplacista". Señaló además que "cuenta con serias advertencias de legalidad, puesto que el céntimo sanitario, según el Consejo Consultivo, no es compatible con la normativa comunitaria", cuestión que el PSOE niega rotundamente.
Así, Teniente ha preguntado al consejero si la Administración regional "es consciente de esa irresponsabilidad", añadiendo que podría acarrear reclamaciones. Además ha dicho que el céntimo sanitario no servirá para mantener la sanidad, sino para pagar los más de 100 altos cargos de la consejería.
En materia de IRPF, ha mantenido que el Consejo Consultivo considera que la ley no reparte equitativamente la carga y ha llamado la atención sobre el hecho de que Extremadura es de las pocas comunidades que continúa con el impuesto de sucesiones y donaciones.
Por su parte, el diputado socialista Ignacio Sánchez Amor ha negado que el Consejo Consultivo considere ilegal la aprobación de la ley y ha compartido con Franco la idea de que los impuestos son un instrumento para redistribuir la riqueza. "Bajar impuestos no es izquierda, subirlos tampoco, los impuestos son instrumento", aseguró.
El socialista también llamó la atención sobre la necesidad de adaptar el sistema fiscal a la caída de ingresos y demandó al PP "que cuando piden no subir impuestos digan a los ciudadanos que éstos verán erosionados sus derechos". De esta forma, ha acusado al Grupo Popular de "incurrir en un carrusel de incoherencias y de no tener una política presupuestaria".
