El Ministerio de Medio Ambiente ha ampliado a ocho mancomunidades extremeñas el plan de choque para asegurar el abastecimiento de agua para consumo humano. Según un documento presentado ayer por la titular de este departamento, Cristina Narbona, ante el Consejo de Ministros la situación de falta de lluvias no ha mejorado, y es poco probable que en lo que queda de invierno y la primavera las precipitaciones permitan una recuperación de los embalses suficiente para garantizar el abastecimiento a varias decenas de poblaciones de la región.

Por ello, el ministerio ha decidido ampliar el plan de choque anunciado el pasado 24 de febrero. Así, en aquella jornada, y tras una reunión entre el vicepresidente de la Junta, Ignacio Sánchez Amor, y el secretario general para el Desarrollo y la Biodiversidad, Antonio Serrano, este último se comprometió a reservar una partida de 25 millones de euros para actuar en las mancomunidades de la Presa de Santa Lucía, Río Tamuja, La Vera, Los Molinos y Jaime Ozores. La actuación permitiría, a través de interconexiones entre distintas presas o la habilitación de pozos, dar agua a 35 localidades que suman unos 90.000 habitantes.

240.000 HABITANTES Sin embargo, Medio Ambiente se ha replanteado la situación y sumará a estas cinco mancomunidades las de Tentudía y Llerena, así como la zona de Cáceres y su entorno. De este modo, el número de localidades afectadas por el plan de emergencia se amplía ahora hasta 65, que suman casi 240.000 habitantes, esto es, la cuarta parte casi de la población total de la región.

Aunque en esta ampliación del plan no se ha valorado aún el coste de las nuevas actuaciones, la previsión indica que podrían obligar a duplicar el prespuesto asignado.

La intención manifestada por Medio Ambiente es que todas las obras arranquen antes del verano, y que en esos meses --críticos por el mayor consumo de agua debido a las temperaturas y a la mayor afluencia de personas a los pueblos-- estén incluso finalizadas todas aquellas que sea físicamente posible.

Al margen de estas localidades, se mantiene la incertidumbre sobre otro conjunto de poblaciones que se abastecen de los arroyos de montaña, y que ya sufrieron problemas el pasado verano, con cortes de suministro que afectaron a 23.000 personas debido a la falta de nevadas durante el invierno. Casi concluido el invierno, tampoco las cumbres han acumulado este año un volumen significativo de reservas en forma de nieve, lo que hace presagiar nuevos problemas.

SITUACION CRITICA El informe presentado por Narbona indica que la sequía está presentando "mayor crudeza" en cuencas como el alto Tajo --especialmente la zona norte de Cáceres-- y Guadiana, además del Guadalquivir, Segura y Júcar.

En estas zonas, se indica que las reservas están "muy por debajo de todas las series históricas", aunque la ciudadanía puede sentir "una sensación equivocada de que la sequía se ha acabado" debido a las últimas lluvias registradas.