Una técnico de laboratorio y un industrial que llegan desde Barcelona poco antes del inicio del incendio de 2015. «Queríamos un cambio en nuestra vida y nos interesaba la apicultura», cuenta Saray Heredia de lo que les trajo a ella y a su pareja, David Toledano, a Extremadura. La idea que tenían en la cabeza la están poniendo en marcha dentro del Proyecto Mosaico: recrear un bosque melífero, con vegetación autóctona para alimentar a las abejas durante todo el año. Para financiar el proyecto comenzaron haciendo visitas turísticas a las 30 colmenas que tienen ahora. Junto a eso, han desarrollado una app (abeefy) para android con la que se puede llevar un control de las colmenas, una trazabilidad. «Es algo que no existe ahora, todo se lleva en papel», cuenta. Y con esta aplicación (de descarga gratuita aunque se paga por el registro) todo estará en el teléfono móvil y permitirá evaluar la producción.