El sector agrario ha servido de refugio para una parte de quienes han perdido sus puestos de trabajo en el sector de la construcción o en el de los servicios. Una circunstancia que el año pasado se vio favorecida por las buenas campañas registradas en cultivos que generan mucha mano de obra, como la de la fruta o la del tomate.

Ignacio Huertas, secretario general de la organización UPA-UCE, destaca que el sector agrario esta consiguiendo "mantener" los niveles de empleo anteriores a la crisis. También apunta que durante los dos últimos años la situación de crisis económica ha hecho que se contraten a "muchos más españoles" para las faenas agrícolas. "Los españoles habían dejado de lado el sector agrario fundamentalmente por la desproporción de los salarios, por lo que había que recurrir a la contratación de ciudadanos extranjeros", detalla Huertas, que añade que ahora se están teniendo "muchos menos problemas a la hora de encontrar mano de obra, una situación que era frecuente hasta hace dos años".