José María Aznar dijo ayer que la detención del líder del Frente de Liberación de Palestina, Abu Abbas, condenado en ausencia en Italia por el secuestro en 1985 del barco Achille Lauro y el asesinato de uno de sus pasajeros, prueba la relación que mantenía el régimen de Sadam Husein con el terrorismo internacional.

"El Gobierno fue atacado por decir que existían vinculaciones entre Irak y los grupos terroristas. Ayer fue detenido Abu Abbas. Quienes decían que no había vínculos, que digan algo ahora", espetó ufano el presidente del Gobierno después de que tropas estadounidenses capturaran a Abu Abbas el martes pasado por la noche, justo cuando intentaba huir a Siria.

VATICINIO DE "MAS COSAS"

Aznar omitió que la acusación principal contra Sadam, dictada en su día por Washington y asumida por el Gobierno español, era su relación con la red Al Qaeda, responsable de los atentados del 11-S. A falta de pruebas sobre esa conexión, el presidente recurrió al semijubilado Abu Abbas para demostrar los lazos del régimen de Bagdad con el terrorismo. "Se va a demostrar ésa y muchas otras cosas", vaticinó en alusión a la existencia aún no probada de armas de destrucción masiva en Irak.

En rueda de prensa durante la cumbre europea de Atenas, el presidente se refirió también a la conversación que mantuvo anteanoche con el presidente de Siria, Bashar el Asad, a quien Estados Unidos acusa de connivencia con el terrorismo y a quien ha amenazado con represalias si da refugio a exdirigentes del régimen iraquí. Según Aznar, el mandatario sirio le garantizó un "compromiso muy claro y nítido" en la lucha contra el terrorismo, y también "dejó claro" que Siria "no va a servir como foco de inestabilidad en la región ni va a dar refugio a antiguos dirigentes iraquís".

En su más que difícil equilibrismo entre el apoyo incondicional a Estados Unidos y la necesidad de preservar los lazos con el mundo árabe, el presidente del Gobierno respondió con evasivas a una periodista que le preguntó si, tras su conversación con El Asad, consideraba infundadas las acusaciones de Washington. "Me pide detalles que no puedo dar", dijo el presidente. Y añadió: "Creo que las cosas están bien encaminadas". Ayer por la noche Aznar habló con el Rey sobre la situación de Oriente Medio, en una cena en el palacio de Marivent.