Las protestas contra la guerra en Iraq se repitieron ayer en diversos puntos de Extremadura. Así, en las concentraciones convocadas en Badajoz y Mérida participaron en total medio millar de personas, mientras en Cáceres el paro convocado en lugares de trabajo tuvo un seguimiento desigual.
En la capital pacense, alrededor de 300 personas se reunieron en la avenida de Huelva portando velas para expresar su rechazo a la guerra. En la protesta, diversos ciudadanos expresaron sus sentimientos de paz y los organizadores pidieron a los pacenses que coloquen sábanas blancas con crespones negros en los balcones. Al finalizar el acto, Rafael Barragán, uno de los portavoces de la plataforma convocante, anunció que se presentarán en los juzgados denuncias masivas contra el presidente del Gobierno, José María Aznar, por apoyar el conflicto, informa Ascensión M. Romasanta.
Mientras, en la capital autonómica, unas 200 personas, entre las que se encontraban diputados socialistas como Luciano Fernández o Elías Paule; el candidato del PSOE a la Alcaldía, Angel Calle; el director general de Deportes, Manuel Martínez Dávila, el de Presupuestos, Angel Franco, y el coordinador del SES, Juan Carlos Escudero, se concentraron frente al Ayuntamiento, coreando gritos de "no a la guerra", "esto nos pasa por un gobierno facha", "dónde están, no se ven, los fascistas del PP" y "nosotros también somos iraquíes".
La protesta, que avanzó desde la parte central de la Plaza de España hasta las mismas puertas del Consistorio, se disolvió una hora después, informa Juan Carlos Zambrano.
En Cáceres, el paro convocado por UGT tuvo un seguimiento muy desigual, y se dejó sentir, sobre todo, en los Múltiples.
CONSEJO ESCOLAR
Por otra parte, la comisión permanente del Consejo Escolar de Extremadura hizo ayer público un comunicado en el que se apuesta por la paz "como forma natural de convivencia de la sociedad en cualquier lugar del mundo, como instrumento básico de relaciones entre los pueblos y como elemento indispensable para garantizar la vida en democracia".
Además, la comisión exige al Gobierno que secunde las resoluciones de la ONU.
En el comunicado, el Consejo Escolar aclara que de ningún modo se pretende disculpar el régimen dictatorial de Iraq, "que atropella los más elementales derechos humanos".
Finalmente, se manifiesta el rechazo a las actuaciones que pretendan manipular la grave situación bélica.
