Las comisiones bancarias se han convertido en los últimos años en una de las principales fuentes de ingresos de las entidades financieras extremeñas, hasta el punto que ya alcanzan para cubrir la cuarta parte de sus gastos generales. Aún así, las comisiones que cobra la banca extremeña se sitúan entre las menores del país, ya que la banca española compensa hasta el 60% de sus gastos con esta partida. En total, el último balance hecho público revela que los bancos y cajas de la región cobraron en el 2002 más de 35 millones de euros por este concepto, lo que supone casi el 24% de sus gastos generales.

El considerable aumento de las comisiones bancarias en los últimos tiempos, tanto en España como en los países de la Unión Europea, ha provocado que actualmente las cinco entidades bancarias cuya sede central está en la región --un banco, dos cajas de ahorros y dos cajas rurales-- cubran prácticamente la cuarta parte de sus gastos generales a través de este concepto. Tanto es así que las comisiones podría sufragar cerca del 50% de los salarios de sus empleados.

Según las últimas cuentas de resultados que se han hecho públicas, correspondientes al cierre del ejercicio del 2002, la banca extremeña cobró a los usuarios 35,89 millones de euros en comisiones bancarias. Esta cifra supone el 23,8% de los gastos generales que afrontan cada año y que ascienden a 150,4 millones de euros, según los datos que manejan las propias entidades.

LEJOS DE LA MEDIA Sin embargo, y pese a que cada extremeño tendría que haber pagado de su bolsillo más de 30 euros en comisiones para alcanzar esa partida, las comisiones que cobran las entidades de la región están aún muy lejos de las de los grandes bancos. De hecho, según un reciente informe elaborado por el Servicio de Estudios de Caixa Catalunya, la banca española cubre más del 60% de sus gastos generales mediante estas partidas. Las comisiones bancarias han ganado tanto peso en los últimos años que actualmente ya abarcan la cuarta parte de los ingresos totales del sector financiero español.

Esta situación es la consecuencia de un proceso iniciado a principios de los noventa, fecha desde la que los ingresos de por comisiones han aumentado más de un 12%, pasando de 2.000 millones de euros en 1990 a los 7.500 millones que se cobraron en el 2001, explica el informe de Caixa Catalunya. Este cambio se debe, entre otras cosas, a la evolución del modelo bancario, que actualmente "tiende a trasladar a cada cliente los costes de las gestiones que requiere", cobrando comisiones por muchos conceptos que antes eran totalmente gratuitos.

Además, los expertos responsables del estudio destacan que "buena parte de la expansión de las comisiones se explica por el significativo crecimiento de la actividad financiera".

Por último, refleja que "la creciente implantación de las comisiones que se ha vivido en el sector financiero español no es ajena a la tendencia de los principales países del entorno europeo".

Con todo, es posible que a partir de ahora estas cifras se rebajen o, al menos, se estanquen. Una orden ministerial obliga desde el 31 de octubre del año pasado a todos los cajeros del país a informar a los usuarios de las operaciones que conllevan el pago de una comisión. Esta norma, que se aplicará en su totalidad a partir del 30 de abril, se marca como objetivo futuro dar a conocer la comisión exacta de todas las operaciones.

En la práctica supondrá que los usuarios reduzcan el número de operaciones por las que pagan comisiones.