Las informaciones fragmentarias que llegaron desde el campo de batalla reseñaron ayer "una dura batalla librada entre tanques estadounidenses de la primera fuerza expedicionaria de los marines contra columnas de carros de combate" en los alrededores de la segunda ciudad del país, Basora. Esta localidad está considerada un centro neurálgico del petróleo y también de las actividades comerciales. Con estas palabras describió la situación en el frente bélico septentrional el corresponsal de la BBC que acompaña a las fuerzas británicas en su avance.

A juzgar por la resistencia presentada por los blindados iraquís --en apenas unas horas--, los obsoletos carros de combate de origen ruso T-55 poco pudieron hacer frente a los M1A1 del Ejército estadounidense. Los aliados dijeron que los 8.000 soldados de la 51 División Acorazada iraquí, cuya base está situada cerca de Basora, se rindieron ante la acción de las fuerzas atacantes.

NADA QUE VER CON

LEJANOS PRECEDENTES

Lejos queda la mitología que envolvió en otros tiempos a las divisiones Panzer alemanas en la segunda guerra mundial o los más recientes enfrentamientos de tanques en los países de Oriente Próximo. La batalla de blindados de Basora, aparentemente, nada tuvo que ver con los sangrientos asaltos de carros de combate que se desarrollaron durante la guerra de los Seis Días (1967), en la que sólo Egipto perdió 800 tanques.

Se estimaba que, en su arsenal, el Ejército de Tierra iraquí, una supuestamente poderosa máquina de matar hasta antes de la primera guerra del Golfo (1991), tenía 2.200 carros de combate T-72, T-62, T-54 y T-55, más otros fabricados en China.

ARSENAL INUTILIZADO O

RESERVA PARA LA CAPITAL

Sin embargo, la escasa resistencia mostrada en las inmediaciones de la segunda ciudad permite colegir que, o bien el arsenal ha quedado inutilizado por caducidad, o bien el régimen de Bagdad ha optado por concentrar sus mejores unidades para la defensa de la capital.

En el bando aliado, por el contrario, el avance de los blindados anglo-norteamericanos a través del desierto sí ha recurrido a imitar precedentes históricos que estaban basados en las teorías de la guerra formuladas por Erich von Manstein. Ese mariscal alemán fue quien diseñó el ataque blindado a través de las Ardenas. Otra de las fuentes de inspiración de esos precedentes fueron las campañas que se vivieron en el norte de Africa de Erwin Rommel.

La sofisticación tecnológica aliada va acompañada de una puesta en práctica del concepto de Blitzkrieg, la guerra relámpago, que los israelís copiaron de los alemanes y que los estadounidenses, por su parte, también emplearon en la operación denominada Tormenta del Desierto, en el año 1991, contra el mismo enemigo.

USO DE BLINDADOS CONTRA

LAS LINEAS DE DEFENSA

Tras los bombardeos de las líneas del frente y de la retaguardia, el manual de la Blitzkrieg menciona la ruptura de las líneas de defensa mediante la utilización de blindados, tal y como ocurrió ayer en Basora.

En la siguiente fase, la infantería y las unidades de apoyo cercarán a las tropas enemigas y capturarán las posiciones que los tanques dejan atrás en la carrera desenfrenada que llevan a cabo para hacerse con la ocupación del territorio.