Solo la izquierda aberzale se atrevió ayer a interpretar el anuncio de ETA como una decisión "unilateral, indefinida y no condicionada" que tiene un "valor incuestionableO. para la "instalación de la paz". Aunque la textualidad de la declaración de la banda dista mucho del alto el fuego permanente y verificable que la propia Batasuna había decidido solicitar a la organización armada, en un documento pactado con EA, los portavoces aberzales se cuidaron ayer mucho de no expresar ni un sólo gesto de disgusto y añadieron al comunicado los adjetivos que ETA evitó incluir a su documento.

La breve declaración de los aberzales, leída en euskera y en castellano, no incluyó ni un reproche a ETA, pero sí enfatizó que se abre ya la puerta a una "nueva" fase política. A lo más que se atrevieron fue a dejar constancia en su "valoración de urgencia" de que también las bases de la izquierda aberzale han contribuido al nuevo escenario político con debate y conclusiones "inequívocas" de "carácter estratégico".

Todo esto se dijo en una comparecencia sin preguntas (como suele ser habitual) de los portavoces aberzales Txelui Moreno, Tasio Erkizia, Marine Pueyo y Agurne Baruso en un hotel de San Sebastián. El mensaje de los herederos de Batasuna incidió en la importancia de que se abran ahora "espacios de diálogo y negociación" en los que quiere participar. Además de reafirmar su compromiso con las vías políticas, apelaron a la "corresponsabilidad" de partidos, sindicatos y gobiernos para responder de manera "constructiva".

CALMA EN EL PNV El PNV aseguró ayer que no tiene prisa por contestar a una declaración que dista mucho de las expectativas de la sociedad vasca. Los nacionalistas emplazaron el análisis del anuncio etarra a la reunión que hoy, como cada lunes, mantendrá la ejecutiva.