CONTAMINACION

Los biocarburantes no contienen azufre, por lo que su combustión no genera anhídrido sulfuroso, responsable de la lluvia ácida. Además, tampoco emiten dióxido de carbono al arder. En cuanto a los residuos del proceso productivo, son aprovechables casi íntegramente como alimento del ganado o abono.

AGRICULTORES

La utilización de maíz, en el caso del bioetanol, y de girasol y soja, en el caso del biodiesel, augura grandes ventajas para los agricultores. Así, al tratarse de cultivos industriales, los labradores cobrarían de la UE por la retirada de tierras. Después, se dedicarían a producir para las factorías, con contratos asegurados para su producción a precio fijo. Según un primer cálculo, la planta de bioetanol necesitaría 224.000 toneladas de maíz al año, y la de biodiesel, en su primera fase, 145.000 de girasol.

CONSUMIDORES

Tal y como va el mercado del petróleo, los biocarburantes se convierten en más atractivos aún. Sin modificar los actuales motores, los de gasolina admiten un 15% de bioetanol, lo que supone pagar diez céntimos menos por litro. En el caso del biodiesel, puede sustituir al cien por cien al gasóleo, con un precio fijo de 54 céntimos por litro, aunque se suele optar por la sustitución al 30% de biodiesel.