Seis de la tarde. Al otro lado del teléfono, Félix Campo jr , hijo del presidente del Cacereño. La respuesta, muy amable, ante el requirimiento de este periódico, es la siguiente: "Siento mucho no poderte ayudar pero, como comprenderás, es un tema familiar delicado y prefiero guardarme la opinión", se disculpa cortésmente el portero para no pronunciarse después sobre el suceso en el que se ha visto envuelto su padre, que ha causado una enorme conmoción en toda la comunidad extremeña.

La familia del empresario salmantino y sus más allegados aún no se explican qué ha podido suceder. "Yo, porque el tema está en el juzgado que si no, no me lo hubiera creído", dice desde Salamanca el vicepresidente económico y mano derecha de Campo, Patricio Castaño, quien hizo votos para que su amigo saliera cuanto antes de prisión.

"Hago una petición de respeto hacia un tema personal y damos nuestro más inequívoco e irrefutable apoyo al presidente", responde por su parte el director deportivo y entrenador, Ismael Díaz quien, haciendo suya la pretendida normalidad del trabajo diario en el club, estuvo con los jugadores Rocha y Caballero en varias localidades (Torremocha, Torrequemada, Valdefuentes y Albalá) para promocionar las escuelas rurales que promueve la entidad.

MUTISMO DE LA PLANTILLA

Mientras tanto, el capitán del equipo, Julio Cobos, que se acaba de enterar de la noticia, declina hacer cualquier comentario por, insiste, ser exclusivamente un problema personal del presidente verde.

Algo más alterado estaba el director general del club, José Ignacio Aguinaga, quien, además de pedir respeto y mostrarse visiblemente molesto por la información que ofreció ayer este diario, considera "poco ético" que se haya dado públicamente el nombre del presidente.

Juan Ojalvo, directivo cacereño del club, insistía en la misma extrañeza que manifestaba Patricio Castaño. "Félix es un tío sanote, con el que he estado aquí y fuera, con él y con su mujer, y siempre ha sido muy cariñoso; me acabo de enterar y no me pega en absoluto de él" , resaltó también Ojalvo. Todos ellos coincidían en que el suceso no debe afectar a la plantilla y el futuro que se presenta en los próximos partidos. "Aquí no ha pasado nada; el club es otra cosa y lo único que pasa hoy (por ayer) es que no se entrena por ser martes", insistió el vicepresidente Castaño.