"Es una noticia muy triste para el pueblo, pero por desgracia actualmente la relación era nula", afirma Miguel Antonio García Rubiales, alcalde de Torre de Miguel Sesmero, que asegura que la última vez que Barjola estuvo en el pueblo fue en 1974. El alcalde explica que desde que llegó a la alcaldía había intentado en varias ocasiones ponerse en contacto con el pintor. En cualquier caso, García Rubiales explica que su intención es poner su nombre a la calle en la que nació en artista, un nombre que ya lleva la universidad popular.

Una de las hermanas del pintor, Candelaria, aún vive en el pueblo, junto a sus dos hijos. También permanece allí María Alvarez, su prima carnal, que define al pintor como "un hombre muy bueno, aunque algo tímido". María recuerda como las visitas de Juan a su pueblo fueron disminuyendo desde que se casó y, sobre todo, a partir de la muerte de sus madre. Para María fue la falta de apoyo que se le dio en sus comienzos lo que llevó al pintor a tener cierto resentimiento hacia sus orígenes. "A otra gente que tenía más medios sí se le dieron becas, y el tuvo que salir adelante estudiando y trabajando al mismo tiempo".