De los 690 menores de edad que están actualmente bajo la tutela de la Junta de Extremadura, algo más de la mitad --388-- permanecen acogidos por alguna familia de la comunidad autónoma, según los últimos datos facilitados desde la Consejería de Bienestar Social. El resto están repartidos por los diversos centros de atención que gestiona el Ejecutivo regional.
Cada año son más los niños que abandonan las residencias de acogida para convivir con una familia. Sólo en lo que va de año --hasta el 30 de junio-- se han cursado ya 38 solicitudes para hacerse cargo de uno de estos menores, mientras que en todo el 2005 se recibieron 43 demandas. No obstante, no todos los procesos terminan satisfactoriamente, ya que los candidatos deben superar una serie de evaluaciones y cursos supervisados por expertos de la Dirección General de Infancia y Familia.
Desde la Dirección General de Infancia y Familia de la Junta de Extremadura consideran que "el Programa de Acogimiento Familiar --con casi una década de existencia-- ha conseguido un grado de consolidación importante y positivo, especialmente en su vertiente de familias extensas. Sin embargo, hay algunos aspectos que requieren ser desarrollados con mayor amplitud, como el acogimiento con familias ajenas". En este sentido, explican que hay casos de menores que no tienen alternativas familiares --ya sea por la ausencia de familiares directos o por la falta de interés de éstos-- y es necesario contar con un mayor número de personas dispuestas a acogerles hasta que puedan regresar con sus padres biológicos o alcancen la mayoría de edad.
Esta situación de predominio del acogimiento extenso sobre el ajeno se refleja en las 38 solicitudes de tutela tramitadas durante este año, ya que de ellas únicamente cuatro corresponden a hogares ajenos al propio entorno familiar del niño.
TIPOS DE ACOGIDA En el Programa de Acogimiento Familiar de la Junta de Extremadura se contemplan varios tipos de tutela. Por una parte, pueden ser realizados por hogares ajenos al propio menor o bien por familiares directos, como tíos o abuelos (se conoce como familia extensa). Además, la tutela puede ser con previsión de retorno con los padres biológicos (en este caso el tiempo de acogida variará entre uno y cuatro meses --a corto plazo-- o entre uno y dos años --a largo plazo) y se puede realizar de forma permanente. En este caso el menor permanecerá con su familia de acogida hasta que cumpla la mayoría de edad.
Además, desde la Administración regional se pretende fomentar otro tipo de tutela, que podría calificarse como acogida ocasional. El objetivo de esta nueva iniciativa es que
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