Como cada año el informe anual de la asociación El Defensor del Paciente expone algunos de los casos más graves en materia de errores y negligencias médicas. En esta ocasión detalla dos muertes ocurridas en la comunidad autónoma extremeña.

El primero de ellos tuvo lugar en el mes de febrero en el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres. A los cuatro días de dar a luz "y tras un parto mal llevado" una mujer falleció sin que su marido recibiese ninguna información ni explicación al respecto.

Otro de los casos, que en esta ocasión sí ha llegado al juzgado, es el de un paciente que estaba a la espera de que se le hiciese una prueba cardíaca --concretamente una resincronización cardíaca-- en el Hospital Virgen del Puerto de Plasencia. A pesar de las quejas y reclamaciones que presentó para que se le realizase la prueba cuanto antes acabó falleciendo mientras seguía en lista de espera.

Otra de las denuncias ha sido presentada por un paciente que falleció en octubre del 2004 tras ser infectado por aspergillus en el Hospital Infanta Cristina de Badajoz.

También consideran un caso claro de negligencia médica el de una mujer embarazada que tuvo un embarazo problemático, aunque ni ella ni su familia fueron informadas de ello en ningún momento. En el momento del parto se utilizaron las ventosas en lugar de la cesárea --más indicada en estos casos-- y el bebé falleció a las pocas horas.

De todos los casos que llegan a Adepa, apenas el 25% son derivados a la asesoría jurídica. En Extremadura la asesoría jurídica asociada que lleva las denuncia de Adepa es el bufete de Santiago Díez.