Expertos del Instituto de Investigación Marina de Vigo, dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), han hecho público un durísimo manifiesto en el que piden el cese, entre otros, de sus propios compañeros responsables de las decisiones técnicas que llevaron al Prestige al fondo del mar. "Exigimos la dimisión en pleno de los representantes políticos actuales de nuestros gobiernos autonómico y central, así como de nuestra institución, el CSIC", especifican en una carta.

Los científicos gallegos consideran que "las decisiones adoptadas por el Gobierno central y ejecutadas desde su delegación en Galicia son determinantes en esta catástrofe. De entre todos los escenarios posibles se ha optado por el peor". Insisten en que, aunque la marea negra desaparezca, sus daños permanecerán. Critican la falta de medios: "Mientras países de nuestro entorno disponen de estructuras y medios eficaces con los que paliar estos desastres, nosotros aparentemente no hemos aprendido nada de experiencias pasadas".

Y añaden: "Nos consta que este país tiene recursos y profesionales capacitados, por lo que en ningún caso la descoordinación es producto de la excepcionalidad. Esta, más bien, parece administrada premeditadamente, minimizando el tamaño del vertido, su impacto en la costa o poniendo serios obstáculos a la declaración de Galicia como zona catastrófica".

Los expertos señalan que "es incomprensible que el Ministerio de Ciencia y Tecnología, del que dependen el CSIC y el Instituto Español de Oceanografía, no haya emitido hasta el 10 de diciembre ni un informe sobre la situación" cuando sí lo hizo, por ejemplo, cinco días después del desastre de Aznalcóllar. También critican a los medios de comunicación públicos, "ayudados por otros como Antena 3", que en su opinión han creado "una marea negra informativa".