El portavoz de CiU, Xavier Trias, reclamó ayer en el Congreso de los Diputados que se inicie de inmediato un trabajo activo y eficaz para que la Unión Europea tenga un nuevo impulso, después de la fractura interna que ha sufrido la institución a raíz de las divergencias de los países miembros sobre el conflicto de Irak. En una intervención en la que rebajó las críticas de la federación nacionalista, Trias subrayó que para CiU es "necesario" que Europa juegue un papel "importante y autónomo" en la escena internacional, sin renunciar a una efectiva cooperación con EEUU.
Pese a su tono conciliador, el portavoz nacionalista recordó que no ha habido cambios en su posición. "Estamos con los que piden que la guerra se detenga cuanto antes", dijo. A continuación expresó su sentimiento de impotencia ante las bombas que desde hace seis días no cesan de caer sobre Bagdad.
Pero fue el coordinador de IU, Gaspar Llamazares, el que utilizó la descalificación de más grueso calibre contra José María Aznar. Dirigiéndose al presidente del Gobierno le increpó: "Sepa que Roma no paga a, puntos suspensivos". Con esta alusión intentaba escenificar que Aznar ya no contaba para EEUU y el Reino, al haber quedado excluido de la reunión que anoche celebraron George Bush y Tony Blair en la residencia presidencial de Camp David para hablar sobre el conflicto, y especialmente de la posguerra. "Hoy le han traicionado", apostilló Llamazares.
"CONSENSO TRAMPA"
El dirigente de IU acusó a Aznar de haber ofrecido a la oposición un "consenso trampa" sobre la posición a adoptar cuando acabe la guerra en Irak. A su juicio, ni siquiera la UE quiere pasar esa página y situarse ya en la posguerra. Advirtió al PP de que está sufriendo "el shock y el espanto electoral" como consecuencia del empecinamiento de su líder.
Igualmente, responsabilizó al presidente del Ejecutivo de avergonzar a los españoles por poner las bases militares y el Ejército "al servicio de una mascarada que se dice humanitaria".
Por su parte, Iñaki Anasagasti, portavoz del PNV, criticó la "hipocresía" de José María Aznar por hacer un discurso "equidistante" respecto a las víctimas de la guerra y por pensar que se trata de "víctimas de segunda porque son árabes y están lejos". El discurso sobre el terrorismo, apostilló, o es universal o es falso. Anasagasti acusó al PP de haber cambiado su posición respecto al régimen iraquí, y mostró fotos del portavoz popular en la comisión de Exteriores del Congreso, Gustavo de Arístegui, junto a Sadam Husein, en una visita a Bagdad.
