Los revolucionarios cambios en el cobro de multas y la retirada de puntos que incluye la nueva ley de seguridad vial no serían posibles sin las nuevas tecnologías. Correo electrónico, mensajes a los teléfonos móviles, sanciones colgadas en internet y pago de las multas con tarjeta a pie de carretera. De todo ello tirarán las administraciones para cumplir con el objetivo de cerrar los procedimientos sancionadores en el máximo de dos meses que pretende la norma.

La reforma legal estimula el pago inmediato de la sanción. Si se abona antes de 15 días, se aplicará un descuento del 40%. También penaliza el impago en los casos de infracciones más graves. A los conductores ebrios, por ejemplo, se les vetará el uso de su vehículo hasta que hayan pagado la multa. Pero para que estas previsiones sean efectivas, debía establecerse un sistema sencillo de pago inmediato. La sanción se podrá abonar con tarjeta de crédito en el acto con el correspondiente descuento. Algunos cuerpos, como los Mossos d´Esquadra, ya disponen del sistema en fase experimental, pero cuando la ley esté en vigor, todas las policías de tráfico, incluidas las locales, deberán ofrecer esta facilidad. La Guardia Civil ya opera con PDA en 33 provincias y prevé extender la experiencia al resto próximamente.

¿Y si la sanción es de aparcamiento o de radar fijo y el agente no ha podido notificar la multa a pie de calle o carretera? El documento seguirá llegando por el método tradicional al domicilio, pero solo se hará un intento. Si no se consigue entregar por la razón que sea, se colgará en una web especial, denominada Tablón Edictal de Sanciones de Tráfico. ¿Y si el afectado está de viaje? Cualquiera que quiera asegurarse de que le llegan las notificaciones de multas tendrá abierto un camino muy simple: pedir a la Dirección General de Tráfico que le asigne una Dirección Electrónica Vial (DEV), donde le serán remitidas todas las comunicaciones oficiales.

Para evitar que el conductor tenga que consultar periódicamente su buzón de multas, cuando estas lleguen se le mandará un aviso al correo electrónico personal y, si el automovilista lo desea, al teléfono móvil. Lo mismo ocurrirá con el tablón virtual. Los conductores podrán pedir que se les avise por SMS. Una vez que hayan tenido conocimiento de las mismas, podrán abonarlas por internet, también con la tarjeta de crédito.

Hay una variante que no afecta al ciudadano común, pero sí a las empresas y a las administraciones. Las sociedades propietarias de vehículos estarán obligadas a tener una dirección electrónica donde recibir las notificaciones, que ya no serán enviadas a su domicilio nunca más.