Aunque pueda parecer sorprendente hay quien piensa que un criadero de ranas, de caracoles e incluso de lombrices puede ser un negocio rentable en Extremadura.

Al menos así lo reflejan los proyectos de creación de empleo presentados por Energías Especiales de Extremadura, un sorprendente catálogo de iniciativas que también incluye un cementerio de animales y una granja de cocodrilos. En este último negocio, que costaría 700.000 euros y crearía 12 empleos, el objetivo es vender la carne y la piel.

También resulta novedosa, aunque en otro ámbito, la iniciativa para crear un gran contact center en Los Ibores. Un contact center es una empresa dedicada a la subcontratación de servicios de compañías de de tamaño grande y mediano. En concreto, ofrecen servicios de comunicaciones, herramientas de gestión de recursos o sistemas de creación de contactos.

Sin nuevos planes

Pero no todas las empresas han sido tan específicas en lo referido a la creación de empleo. Un ejemplo claro es el de Elios Renovables, una firma integrada por la Sociedad Anónima Minero Catalano Aragonesa (Samca) y la extremeña Exaasa. En lugar de nuevos puestos de trabajo esta empresa propone una inversión para mantener 115 empleos en la planta pacense de Exaasa. También presentan como aval de creación de empleo la colaboración con las inversiones municipales y cinco solares termosolares que ya se están tramitando.

Algo parecido ocurre con Aldesa Construcciones, que no concreta nuevas actuaciones, y con las sociedades Electra de Malvana, Electra de Montánchez y Electra de Sierra de San Pedro, empresas participadas por Caja Extremadura, Iberdrola, Urbaenergía y Eólica Navarra que plantean como aval inversiones ya anunciadas hace meses por todas estas compañías.

Pero sin duda el caso más llamativo es el de la refinería proyectada por el Grupo Gallardo en la zona de Tierra de Barros. Y es que Refinería Balboa --sociedad en la que participan la Junta y Caja Madrid, entre otras entidades-- proyecta un parque eólico y presenta como plan de creación de empleo la planta petrolífera, actualmente en manos del Ministerio de Medio Ambiente. Algo que, por cierto, también hace Caja Extremadura.

No está claro que todas estas propuestas puedan prosperar. El pasado 2 de septiembre el consejero de Economía y Trabajo, Manuel Amigo, dejaba claro que las industrias asociadas debían ser de nueva creación.

Es decir, que no sirven proyectos que ya estén en marcha o presentados previamente. "Aquí no se trata de premiar a alguien con un parque eólico porque instale alguna empresa, sino de que se generen nuevas empresas y empleo de calidad en determinados lugares", apuntó Amigo.