El Congreso dio ayer luz verde al Proyecto de Ley de Reproducción Humana Asistida, que elimina el número máximo de ovocitos para implantar en cada ciclo reproductivo, permite la selección de embriones para curar a un hijo enfermo y prohíbe expresamente la clonación reproductiva y las madres de alquiler.

La ministra de Sanidad, Elena Salgado, destacó que el objetivo de la norma, entre otros, es facilitar al máximo que las parejas con problemas de fertilidad puedan tener hijos y aplicar nuevas técnicas a la prevención y tratamiento de enfermedades. PP y CiU se manifestaron en contra de los puntos más polémicos y la Iglesia denunció que con la reforma se permite la eugenesia, la clonación de seres humanos y el trato de embriones como material de comercio.

El aspecto más controvertido de la ley, informa Europa Press, es la posibilidad de hacer un diagnóstico preimplantacional que permita seleccionar un embrión para curar a un hijo enfermo. Durante la exposición de la norma, Salgado recordó que esta autorización da respuesta a una demanda social que no afecta a muchas familias (lo han solicitado 150 familias españolas), pero que "aunque hubiera sólo una, ya sería motivo suficiente para realizar la reforma".

La ministra recordó no obstante que se recurriría a esta opción en casos excepcionales y siempre con el visto bueno de la Comisión Nacional de Reproducción Asistida y aseguró que su departamento ha trabajado durante meses en estrecha colaboración con la citada comisión, cuyos expertos asesoraron "con riguroso respeto y bajo principios éticos para conseguir una ley perdurable". Salgado criticó que haya personas que califican de "inmoral" tener un hijo con el propósito de, además de quererlo, poder salvar la vida de terceros, cuando ese niño nace con el don de salvar a otros.

Por otro lado, la ley elimina el máximo de tres ovocitos que se permitían implantar por cada ciclo, algo que, según Salgado, responde a una demanda social. La normativa también contempla sanciones que van desde los mil euros al millón para los centros que cometan infracciones.