El portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran Lleida, afirmó ayer que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha movido por razones electorales y no de Estado a la hora de reformar el Ejecutivo. El nacionalista catalán afirmó que el nuevo reparto de carteras dará "cierto oxígeno" al líder del PSOE: "Este nuevo Gobierno apuntala las baterías para disparar a la oposición. Zapatero ha reforzado el núcleo duro con sus personas más afines".

Duran elogió con ironía "la habilidad" del presidente, pues logró que ayer nadie hablara de los presupuestos aprobados por el Congreso.

"SEGUNDO RECORTE" ERC e ICV rechazaron los cambios. El portavoz de los republicanos, Joan Ridao, afirmó que Zapatero refuerza de así su perfil político pero, si no rectifica su gestión, será el Gobierno de la crisis y el de los "cinco millones de parados".

Por su parte, el diputado de ICV Joan Herrera criticó que las reformas demuestran la "insensibilidad" de Zapatero hacia las políticas sociales.

El diputado de IU, Gaspar Llamazares, calificó la remodelación como una concesión a la derecha, que repetidamente había pedido la eliminación de los ministerio de Vivienda e Igualdad.