Hacer selectividad cuesta más o menos dinero en función de la comunidad donde resida. Un estudiante que realice la fase general y además escoja dos materias de la fase específica para poder subir nota ha tenido que pagar 72 euros en Castilla-La Mancha mientras en Castilla y León eso mismo le ha costado 137,3 euros. Son los dos extremos de la tabla nacional, en la que Extremadura está por debajo de la media, según un informe del Observatorio del Sistema Universitario.

Los estudiantes extremeños han pagado 78,26 euros para poder examinarse la próxima semana de la fase general y de dos materias de la específica. Cada asignatura de más en la fase para subir nota cuesta 12,90 euros. Extremadura es así la séptima comunidad más barata del país.

Las tasas regionales varían mucho también si el alumno se examina solo de la fase general de selectividad. En ese caso, Castilla-La Mancha sigue teniendo el precio más bajo 52,99 euros frente a los 124,12 euros que cuesta en Aragón, puesto que esta última comunidad no tiene un precio fijado solo para esa fase.

En cuanto a la fase voluntaria que permite subir nota, una opción que escoge la mayoría de los alumnos que se presentan a selectividad, el precio más caro está en Aragón. A partir de la tercera asignatura a examen cada materia cuesta 30,93 euros. Los estudiantes tienen la opción de examinarse hasta de cuatro materias para poder llegar al 14. El precio más bajo por asignatura se ecuentra en Madrid, con 10,20 euros por cada una. Hay seis comunidades que han puesto un precio único para toda la prueba: Canarias, Cantabria, Comuniad Valenciana, Galicia, Navarra y País Vasco. Así, la selectividad con las cuatro materias específicas posibles es más cara en La Rioja (192 euros) y la más barata está en Galicia (64 euros).