Los líderes del eje de la paz (Rusia, Francia y Alemania) descartaron ayer la posibilidad de que Irak sea dividido por los aliados en "zonas de ocupación". "Un nuevo Yalta no se corresponde con mi visión de cómo se tiene que conformar el sistema de seguridad internacional", declaró el presidente ruso, Vladimir Putin, refiriéndose al pacto entre Winston Churchill, Josef Stalin y Theodor Roosevelt que diseñó el nuevo mapa internacional al final de la segunda guerra mundial.

Putin, su homólogo francés, Jacques Chirac, y el canciller alemán, Gerhard Schröder, están desde ayer reunidos en la ciudad rusa de San Petersburgo. Es el primer encuentro de los tres líderes tras el inicio de la guerra.

"No necesitamos un Yalta ni un nuevo orden. Hay que respetar la Carta de las Naciones Unidas", dijo Schröder. Los mandatarios volvieron a insistir en que la ONU tiene que tomar las riendas del tema iraquí de inmediato. "Cuanto más tardemos en hacerlo, más cerca estaremos de un sistema colonial", aseguró Putin.

El presidente ruso afirmó que el "único resultado positivo" de la guerra ha sido el desmoronamiento de la dictadura iraquí y añadió que la intervención de los aliados no ha cumplido su misión principal: desarmar a Bagdad. "El único objetivo legítimo de la intervención era desarmar al régimen iraquí. Sin embargo, hasta el momento no se han encontrado pruebas de que Sadam Husein tuviera armas de destrucción masiva", dijo Putin.

"BUSCAMOS SOLUCIONES"

Moscú, París y Berlín invitaron a otros países a participar en el debate sobre el futuro del país. "Nuestro objetivo no es dividir a la comunidad internacional, sino buscar soluciones del problema iraquí que resulten aceptables para todos", afirmó Putin.

El líder ruso recordó que Moscú, junto con Berlín y París, siempre ha considerado que el régimen iraquí no respetaba las normas de la democracia. "Pero no se pueden solucionar semejantes problemas por medio de la guerra. En caso contrario habría que declarar guerra a todos los países que no responden a los estándares occidentales", opinó.

Pese a las críticas hacia Estados Unidos y el Reino Unido, el Kremlin explicó que la cumbre tripartita no trata de ser la respuesta a la cumbre que George Bush y Tony Blair celebraron esta semana en Irlanda del Norte.