O se pasaban a la comercializadora de su compañía adelantando el valor de dos facturas (lo que supondría desembolsar en total unos 24.000 euros), o se quedaban en la distribuidora "pero con un precio del kilovatio mucho más elevado y subiéndonos la factura un 5% todos los meses". Esta fue la disyuntiva que hizo que los responsables de Canteras Barquero Fortuna, una empresa de Quintana de la Serena dedicada a la extracción de gran¡to, decidieran cambiar de Iberdrola a Unión Fenosa. Entre esta cantera y Granitos Prim Barquero, otra firma del mismo grupo, suman una factura de la luz mensual de unos 12.000 euros, según explica José Manuel Cruz, administrativo de esta empresa. Tras el cambio, "el precio ahora es algo más económico", indica Cruz, si bien admite que el margen de negociación que se tuvo con la nueva compañía en este ámbito fue muy limitado. El hecho de elegir Unión Fenosa fue, cuenta, más que nada porque es "de las únicas" con presencia en la zona

Cruz, que conoce varios casos similares en otras empresas de este sector, considera "casi como un chantaje" la exigencia de avalar las facturas "y más en un momento en el que no todas las empresas pueden hacer ese desembolso", aunque añade que "ya no nos la piden. El otro día nos han llamado diciendo que si seguíamos --en la otra empresa se continúa con la misma suministradora-- con ellos, no lo exigirían".

Los trámites para el cambio se hicieron en octubre, pero ha sido ahora cuando les ha llegado la primera factura de su nueva eléctrica. Cruz confirma que la calidad del suministro sigue siendo la misma: no muy buena. "Aquí siempre ha habido microcortes", explica, una cuestión que más de una vez, añade, ha ocasionado problemas a las numerosas empresas que se dedican a la extracción de granito en la zona ya que, al recuperarse la tensión normal los discos para cortar la piedra pueden quemarse. Cada uno de ellos cuesta entre dos y tres mil euros: "Aquí se ha reclamado, pero la compañía nunca ha pagado nada. Dice que no es asunto suyo".