Sorpresa e incertidumbre en la Universidad de Extremadura. El recorte de 22,2 millones de euros previsto en los presupuestos de la Junta del próximo año ha puesto en alerta el equipo de gobierno de la Uex que no esperaba semejante tijeretazo y ha generado un malestar generalizado en la comunidad universitaria. La reducción es casi una cuarta parte de los fondos que el Ejecutivo regional transfiere a la institución académica para el desarrollo de su actividad anual, ya que en el ejercicio actual el Gobierno ha destinado 95,4 millones a la Uex y para el próximo prevé solo 73,2 millones de euros. Esa rebaja se basa sobre todo en las transferencias de la Junta a la Universidad, que se cifran en 70 millones, frente a los 93 de este año. Por el contrario, hay 200.000 euros más para becas (hasta 800.000 euros) y 250.000 más, sobre todo en ayudas a la movilidad del alumnado. Ante esta situación, el PSOE extremeño denuncia que ante esa reducción "la Universidad de Extremadura mañana tiene que cerrar facultades y títulos", indicó ayer el portavoz parlamentario socialista, Valentín García.

El presupuesto global de la universidad extremeña para este año asciende a 145 millones de euros, de los que casi el 70% proviene de la administración central. Tras conocer las cuentas del próximo año, el rector de la Uex, Segundo Píriz, pidió explicaciones a la consejera de Educación, cuya conversación no trascendió al cierre de esta edición, aunque desde el gabinete aseguraron que el rector valoraría hoy esas cifras. Desde la Consejería de Educación no quisieron detallar ayer en qué se materializará el recorte en la universidad, aunque el consejero de Economía y Hacienda, Antonio Fernández, avanzó que en breve se argumentará tal la decisión.

Tras conocer el tijeretazo al que se enfrenta la Uex para el próximo curso, el propio rector dudó de la veracidad de los datos e incluso barajó la posibilidad de que se tratase de un error en los cálculos, más si cabe teniendo en cuenta que el nuevo gobierno extremeño se ha comprometido en más de una ocasión con la institución a mantener los fondos presupuestarios e incluso a abordar una vieja reclamación de la institución, como es la creación de una ley que garantice una financiación estable y suficiente a la universidad extremeña para no seguir dependiendo de la situación económica de cada ejercicio.

Además, se reducen a la mitad las inversiones previstas para infraestructuras y equipamientos en los centros dependientes de la Uex, al pasar de 2 millones a un millón; y también merma la cuantía para los centros de la Uned de Mérida y Plasencia.

Por todo ello, el PSOE extremeño considera que la situación va a provocar que "la Universidad de Extremadura mañana tiene que cerrar facultades y títulos", indicó García, que considera que es "una metedura de pata no invertir en capital humano e investigación" en la Universidad de Extremadura. En este sentido, también ha denunciado que los presupuestos no contemplan la financiación para el desarrollo de la Ley de Educación.

OTROS RECORTES

Otro recorte considerable en materia educativa, al margen de las enseñanzas universitarias, es la caída la mitad en el gasto en infraestructuras en Infantil y Primaria, sobre todo en construcción, reformas y equipamientos de los centros, una partida que pasa de casi 16 millones a 7,4 millones. También habrá reducción de la inversión a la hora de construir o reformar los institutos, para lo que se han destinado 6 millones, 20 menos que hace un año.

Sin embargo, el Ejecutivo regional insiste en que los servicios educativos no se van a resentir. Todo consiste en "diferir la ejecución de la obra nueva en algunos meses"; es decir, esas obras "van a ir más despacio", comentó el lunes el consejero de Economía y Hacienda.