La suerte de las constructoras extremeñas en las adjudicaciones que realiza el Ministerio de Fomento de los tramos de la Autovía de la Plata (A-66) parece cambiar, aunque un poco tarde. El departamento que dirige Francisco Alvarez-Cascos ha elegido la oferta de la constructora Carija, con sede en Mérida, y de otras dos empresas medianas de Andalucía y la Comunidad Valenciana para ejecutar el tramo que discurrirá entre Fuente de Cantos y el límite de la provincia de Huelva, que es el que tiene un prespuesto más elevado de los 16 en que Fomento ha dividido la Autovía de la Plata a su paso por Extremadura (véase gráfico).
Según ha podido saber EL PERIODICO EXTREMADURA, la ejecución de la obra se encuentra preadjudicada a la unión temporal de empresas (UTE) formada por Carija, GA21 y Rover Alcisa, pero no será hasta dentro de "diez o doce días" cuando se publique la adjudicación definitiva en el Boletín Oficial de Estado (BOE), según han informado fuentes del sector. La trascendencia de la decisión del Ministerio de Fomento radica en que se trata de tramo más caro de la Autovía de la Plata --99,58 millones de euros (16.569 millones de pesetas)-- y en que habrá una empresa extremeña con una participación destacada en la obra.
UN 33% CADA EMPRESA Carija ejecutará un 33% del proyecto, lo que en presupuesto equivale a más de 33 millones de euros (5.500 millones de pesetas). El trazado entre Fuentes de Cantos y límite de Huelva tiene una longitud de 26,2 kilómetros, pero se trata de la obra de mayor envergadura económica. Los siguientes tramos con mayor presupuesto son Almendralejo-Zafra, cuyo importe fue de 92,46 millones de euros, que ya está en servicio y fue ejecutado por Sacyr; y Mérida-Almendralejo, también abierto al tráfico y construidos por ACS por 80,20 millones de euros.
Fomento suele elegir a las grandes empresas nacionales para la construcción de los distintos tramos de la Autovía de la Plata, por lo que el hecho de que una constructora extremeña tenga una papel destacado en el trazado más cuantioso es doblemente relevante. De los 16 tramos de la A-66 (son 14 si no se cuentan las variantes de Plasencia y Fuente de Cantos), sólo faltan por adjudicarse tres: Cáceres-Aldea del Cano, Villar de Plasencia-Plasencia y la variante de Plasencia.
Hasta el momento, la suerte de las constructoras extremeñas en los concursos de la Autovía de la Plata ha sido mínimo. La única adjudicación a una firma de la región era en el tramo Béjar-Aldeanueva del Camino, adjudicado a una UTE en la que Magenta participaba con el 11%. El resto de concursos se los han llevado grupos nacionales: OHL, ACS, Sacyr y Necso, Ploder, Ferrovial. Las sucesivas adjudicaciones del Ministerio de Fomento en los últimos años a constructoras nacionales han provocado reiteradas críticas por parte de las empresas extremeñas, a las que se ha sumado la propia Junta de Extremadura.
SUSPICACIAS CON OHL Las constructoras de la comunidad se han considerado siempre capacitadas para ejecutar obras de este calado y han acusado a Francisco Alvarez-Cascos de favorecer a los grandes grupos nacionales en los concursos de las grandes obras. Las mayores suspicacias se han levantado en torno al grupo Obrascón Huarte Laín (OHL), que preside el exministro Miguel Villar Mir y que ha logrado cinco tramos de la autovía.
Francisco Alvarez-Cascos ha sido preguntado en varias ocasiones por este asunto y se ha limitado a decir que "los concursos los gana siempre la mejor oferta" y que la imparcialidad de los técnicos que adjudican las obras está fuera de toda duda.
Existe ya una mayoría de la Autovía de la Plata en obras. Hay tres tramos que ya están abiertos al tráfico y suman 81,7 kilómetros de los 300 de que consta el trazo total a su paso por Extremadura. Se trata de los trazados Mérida-Almendralejo, Almendralejo-Zafra y Puerto de Béjar-Aldeanueva del Camino. Este último es el de más reciente puesta en servicio, pues está abierto a la circulación desde hace poco más de un año.
Por otro lado, hay once tramos en obras, preadjudicados o a punto de serlo que suman otros 192 kilómetros. El trazado en construcción que está más cercano en el tiempo a entrar en servicio es el que une Plasencia y Cañaveral, de 22,3 kilómetros de longitud y un presupuesto de 75,77 millones de euros. Las obras las hace Ferrovial.
