Alrededor de 1.200 millones de espectadores de todo el mundo tendrán la oportunidad de seguir el próximo sábado la boda real por televisión. Esta es la espectacular audiencia potencial que suman las cerca de 160 cadenas de los cinco continentes que han solicitado pinchar la señal institucional de la ceremonia a TVE, cadena estatal española que la producirá y distribuirá.

Los responsables de TVE explicaron ayer que es difícil cuantificar el número de televisiones que finalmente emitirán la boda, completa o en parte, en directo o en diferido, pues en algunos casos han solicitado la señal agrupaciones de televisiones.

Este es el caso de la Unión Europea de Radiodifusión (UER), que agrupa a 71 televisiones de Europa, Norte de Africa y Oriente Medio, y tiene 45 miembros asociados de otros 28 países. La Organización de Telecomunicaciones Iberoamericanas (OTI), que también ha solicitado la señal, cuenta con 53 cadenas asociadas en toda América.

EXTRANJEROS EN MADRID Algunas de estas cadenas contarán con sus propios equipos. Es el caso de las públicas de Reino Unido (BBC), Alemania (ARD y ZDF), Portugal (RTP), Italia (RAI), Dinamarca y Noruega. Lo mismo harán TV privadas de Alemania, Portugal y la británica Sky New.

Igualmente realizarán una cobertura especial las mexicanas Televisa y TV Azteca y cadenas colombianas y venezolanas, además de la canadiense CBC y la CNN de EEUU. También han solicitado la señal a TVE cadenas de Africa, especialmente del Magreb, Oceanía y Asia (con especial interés de las japonesas NHK y NTV o la china CCTV).

La señal se cederá de forma gratuita durante seis horas, desde poco antes de las 09.00 hasta las 15.00 horas. Carmen Caffarel, directora general de RTVE, reconoció ayer en Madrid que el coste de la retransmisión será "cuantioso", aunque aseguró que no se dispondrán de las cifras totales del gasto hasta que todo acabe. Como dato, señalar que la retransmisión de la boda de la infanta Elena en 1995 significó para TVE, sólo en coste externo, unos 200 millones de las antiguas pesetas.

Al frente de todo el operativo estará el realizador Javier Montemayor, especializado en retransmisiones multitudinarias (como la de los JJOO). Ayer explicó que primará en la emisión "la elegancia, la sobriedad y la profesionalidad" y destacó que los protagonistas de la ceremonia son "una pareja muy apuesta".

El veterano realizador, que lleva 28 años en TVE y estuvo junto a Pilar Miró en la emisión de las bodas de las infantas, explicó que intentará mostrar lo que suceda el sábado sin estridencias. "La señal es para todo el mundo y no podemos decantarnos por ningún aspecto en especial, como quizás algunos querrían", explicó Montemayor, quien se preguntó: "Dentro de 50 años, ¿qué será más importante, el sí quiero o el modelo de los zapatos de algún invitado? Como solución al dilema, intentará "equilibrarlo todo".

EL DESPLIEGUE Montemayor contará para la retrasmisión de la boda con alrededor de 1.000 profesionales de TVE, que han tendido un total de 160 kilómetros de cable para cubrir todo el recorrido, aunque la principal concentración de medios estará en la Almudena. Sólo en la catedral se han tendido 80 kilómetros de cable. En el operativo se utilizarán 27 unidades móviles y cerca de 200 cámaras (29 de ellas robotizadas para control remoto) distribuidas por las calles de Madrid. Sólo en el interior de la Almudena habrá 52 cámaras.

El realizador, que comentó ayer que la catedral es muy "telegénica, especialmente en las tomas desde arriba", ha situado las cámaras de manera que molesten lo menos posible a los invitados y no interfieran en la ceremonia. Así, sólo ocho de las cámaras estarán en la planta de la catedral.