Es el autor teatral más representado de Extremadura, pero ello no le impidió compartir este reconocimiento personal con todo el teatro de la región, del que según dijo "se ha liberado de complejos" a la hora de subirse a las tablas de cualquier escenario de España o del extranjero.

Miguel Murillo lleva treinta años escribiendo y dirigiendo obras de teatro, siempre comprometido con la realidad cultural y social de Extremadura, y los últimos de ellos también como gestor de una industria desde su puesto al frente del Teatro López de Ayala de Badajoz.

Este galardón, que recogió sobre el teatro romano de Mérida, el que simboliza el origen de las raíces culturales de Extremadura, según sus palabras, le servirá para afianzar su compromiso con la realidad que le rodea, una responsabilidad que el considera inherente a los creadores que "nos obliga a ocupar los escenarios con nuestras reflexiones".