La relación de obras extremeñas que están a la espera de evaluación ambiental incluye un total de 18 apartados. Entre las más relevantes cabe destacar que, según la información del Ministerio de Medio Ambiente, sólo una cuarta parte del trazado del tren de alta velocidad por la región se encuentra en este trámite. Se trata del tramo entre Cáceres y Mérida, en el que se anuncia como inminente la publicación en el BOE de la Declaración de Impacto Ambiental.

Otro tramo, de unos 40 kilómetros, entre Novelda y Esparragalejo, que forma parte del trazado Mérida-Badajoz, ya ha superado este trámite. Respecto al resto del trazado, que va desde Cáceres hasta Talayuela, Medio Ambiente indica que Fomento ha variado perfil y trazado, con lo que no sirve el estudio iniciado hace tres años, y habrá que esperar a que termine el periodo de exposición pública del estudio informativo para poder iniciar la declaración ambiental.

De este modo, 31 meses después de que se anunciase que todo el trazado extremeño del AVE estaba en estudio medioambiental, lo cierto es que apenas hay 40 kilómetros con declaración de impacto y otros 70 kilómetros que la tendrán en breve.

Grandes presas

Otro grupo de obras recogidas en los expedientes acumulados en el ministerio es el de grandes presas, responsabilidad precisamente del departamento ministerial que tiene a su cargo las declaraciones medioambientales.

En este caso, las actuaciones afectadas serían embalses como los de Alcollarín, Aljucén, Ardila, Búrdalo, el Golondrón, Piedraescrita Puertos de Guarranque o Villalba, que figuran en la Confederación Hidrográfica del Guadiana como presas en proyecto o estudio, y que son actuaciones incluidas en el plan hidrológico.

Asimismo, la lista incluye la refinería que el Grupo Gallardo proyecta instalar en Tierra de Barros. Esta iniciativa, anunciada hace tres años, no inició su tramitación ambiental hasta el mes pasado. Según apuntó en su día Medio Ambiente, la información remitida por el promotor para iniciar el procedimiento era incompleta, por lo que reclamó más documentación.

Estos datos complementarios, contenidos en la memoria-resumen, tardaron casi un año en ser remitidos al ministerio (en marzo pasado). Posteriormente, mes y medio después, el promotor entregaba finalmente las copias necesarias para que arrancase el estudio de impacto ambiental.

También figura como pendiente el tramo Plasenzuela-Santa Marta de Magasca de la autovía Trujillo-Cáceres.

Centrales de gas

La información de la Subdirección General de Evaluación Ambiental recoge igualmente que se está realizando el estudio de cinco centrales térmicas en Extremadura. Hasta el momento, son esos los proyectos anunciados, que se ubicarían en Mérida, La Zarza y Alange.

Sin embargo, hay una de las iniciativas que parece ya abandonada por sus promotores, y se da como muy probable que otras dos no se hagan. Esta situación debe haberse producido en otras ocasiones en distintos puntos de España, obligando a Medio Ambiente a realizar estudios que luego no eran utilizados. Por ello, el ministerio se plantea aprobar una norma que obligue a las eléctricas a presentar un aval en los proyectos de este tipo.