La dirección de ETA ha decidido expulsar de manera definitiva a los seis presos, entre ellos Makario y Pakito, que suscribieron en un documento el abandono de las armas, según recoge el último boletín interno de la organización, Zutabe.

La organización anunció este verano la suspensión de militancia de Carlos Almorza Arrieta, Pedrito de Andoain; Ignacio Arakama Mendia, Makario ; Francisco Múgica Garmendia, Pakito; Ignacio Bilbao Beaskoetxea, Iñaki de Lemona; Kepa Solana Arrondo; y Koldo Aparicio Benito, y ratifica ahora su expulsión definitiva por adoptar una conducta "grave" con la firma de la carta.

Makario se encuentra en prisión por el asesinato del guardia civil extremeño Avelino Palma. Los hechos ocurrieron el 4 de octubre de 1980, en el municipio alavés de Salvatierra, cuando el agente natural de Olivenza y otros dos compañeros del destacamento de Tráfico --el cabo José Luis Vázquez y Angel Prado--, fallecieron en una emboscada terrorista cuando realizaban labores de vigilancia durante una carrera ciclista popular.

La justicia condenó a Makario como máximo responsable en ese momento de Araba, comando al que se atribuyó el atentado. Con la expulsión de Santo Domingo de Makario en 1997, la Asociación de Víctimas del Terrorismo emprendió acciones tendentes a reabrir todas las causas judiciales pendientes en las que estaba implicado. En octubre del 2000, el Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional dictó providencia por el asesinato del guardia civil extremeño a manos de activistas etarras.

En el Zutabe, ETA indica que los 6 presos "se han esforzado en organizar fuerzas y crear opinión contra el sentido y la línea de actuación" de la organización, lo que considera "una falta de disciplina clara". A su entender, han dado "al enemigo" la oportunidad de "hacer público el tema", algo que estima "una falta de confianza y falta de respeto a la organización".