Cada año se registran en las carreteras extremeñas una media de 20.000 multas por exceso de velocidad, una de las principales causas de las muertes al volante. Las estadísticas indican que cuatro de cada diez conductores fallecidos en la región superaban la velocidad máxima permitida en el momento del accidente, lo que sitúa a Extremadura como la séptima región en porcentaje de accidentados por esta causa.