El sector productivo extremeño contará este año con una partida de más de 3.000 millones de euros para financiar los proyectos que vayan a poner en marcha en la comunidad autónoma. El presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, adquirió este compromiso durante la campaña electoral y se marcó como objetivo la creación de este fondo solidario en su primer año de gestión en la nueva legislatura.

El anuncio lo hizo público ayer el consejero de Economía y Trabajo, Manuel Amigo, quien aseguró que la iniciativa del Ejecutivo regional forma parte de una política de desarrollo que tiene vertientes como el empleo, la inversión productiva o la economía social.

Amigo aseguró que una empresa puede tener más o menos recursos pero sin capacidad de crédito no puede funcionar, por lo que este convenio, del que prácticamente sólo falta fijar la fecha de la firma, dará financiación específica para los sectores estratégicos.

LOS EJES DEL PLAN Las medidas de apoyo a las empresas extremeñas es uno de los ejes sobre los que pivota el proyecto de Ibarra durante esta legislatura. La puesta en marcha del III Plan de Promoción Empresarial e Industrial, la creación de empresas más grandes y competitivas, el fortalecimiento del sector financiero regional y el apoyo financiero a los sectores estratégicos, la potenciación de las infraestructuras industriales, el apoyo al comercio interior y exterior o la mejora de las infraestructuras de comercialización, son algunas de las prioridades de la Administración autonómica hasta el próximo año 2007.

Este proyecto nace basado en la idiosincrasia industrial de Extremadura. A finales del 2003, la región tenía 58.297 empresas, de las que el 99,94% eran consideradas pequeñas o medianas empresas. De éstas, el 95,75% eran consideradas microempresas, es decir con menos de 9 trabajadores, mientras que el número de las catalogadas como grandes empresas era poco relevante (0,06%) y muy por debajo de la media nacional (0,13%).

En la comunidad, el 43% de las actividades empresariales están vinculadas al sector servicio, un 38% al comercio, un 13% al de la construcción y un 8% al de industria. Con estos condicionantes, el proyecto socialista considera que la mejor promoción de las empresas está condenada al fracaso si no es capaz de facilitar los fondos necesarios a aquellos emprendedores dispuestos a arriesgar en una aventura empresarial .

En ese sentido, consideran que para que las empresas extremeñas puedan nacer, crecer y enfrentarse con garantías a la competencia han de tener la posibilidad de recurrir a una financiación ventajosa y adecuada a sus necesidades. Para poner en marcha esta iniciativa, la Junta de Extremadura ha recabado del sistema financiero extremeño los fondos necesarios para seguir impulsando el desarrollo de los sectores productivos estratégicos de la economía regional.

EVOLUCION La evolución de las empresas españolas entre 1996 y el 2003 muestra que en Extremadura ha habido un crecimiento neto de 8.168 empresas, lo que supone un incremento de 16,31%. Esta subida es algo inferior a la media española.

A pesar de estas particularidades, la Junta mantiene que durante los últimos 20 años sus objetivos han sido favorecer la inversión productiva y promover la creación de empleo estable, al tiempo de intentar propiciar la configuración de un moderno sector empresarial. Para romper esta tendencia, la futura política de promoción considera importantes tanto las ayudas al establecimiento de nuevas empresas, como aquellas medidas que contribuyan a hacerlas crecer y consolidarse, ampliando sus horizontes comerciales, la mejora de la calidad y la promoción de la innovación tecnológica en sus procesos.El plan considera además fundamental una mayor oferta de infraestructura industrial en Extremadura. Ibarra ya matizó que las líneas de actuación no pueden consistir sólo en un aumento de la superficie de suelo disponible, sino que debe atender también a las necesidades diferenciadas de los sectores más innovadores de la economía regional, entre otras las ligadas al ámbito tecnológico.

En este contexto, el presidente considera fundamental estimular la cooperación entre las cajas de ahorro regionales en todas aquellas cuestiones que contribuyan al desarrollo regional.