Las familias no gastan ahora con la alegría que lo hacían en la época de bonanza, si bien los expertos de Funcas consideran que los ciudadanos han percibido que "lo peor de la crisis ha pasado". En este sentido, cada vez hay menos miedo y se vuelve al consumo con un poco más de alegría. Este es el caso extremeño, donde el ahorro supone una quinta parte de la renta familiar disponible, lo que para este año la sitúa como la quinta región más ahorradora. Serán seis puntos porcentuales menos que lo ahorrado por las familias de la región en 2009, y ocho respecto a lo que se ahorraba hace un lustro (13,2%).