El sector de empresas de materiales de construcción en Extremadura advierte que, si las administraciones públicas no toman medidas, puede haber centenares de despidos en los próximos meses, debido sobre todo a las dificultades de financiación por parte de las entidades de crédito, que no aceptan pagarés. Así lo explicó ayer Marcos Mariño, presidente de la Asociación de Almacenistas y Fabricantes de Materiales de Construcción de Extremadura (Alfamex), que celebró en Mérida su asamblea general y que agrupa a más de 300 empresas.

La mayor preocupación que tienen estas empresas al día de hoy es "el estrangulamiento financiero que tenemos, los bancos no dan un duro". Eso provoca que en breve "se van a empezar a cerrar muchas empresas en Extremadura", asegura, y pone el ejemplo que él mismo está viviendo en su negocio, dedicado a la fabricación de tubos de hormigón. "Yo voy al banco con un pagaré y el banco me dice no te lo cojo, qué hago, cómo le pago a mis obreros y a mis proveedores", argumenta.

Esto supone que las empresas tendrán que ajustar sus plantillas a la demanda que tengan --que viene marcada por la financiación que les den-- y al personal que pueda pagar, "qué remedio nos queda", avisa, mientras reitera que "va a haber expedientes de regulación de empleo a punta pala".

Otro problema importante por el que atraviesa el sector es el aplazamiento de los pagos. En este sentido, destaca la medida aprobada por el gobierno francés para que los empresarios puedan cobrar en un plazo máximo de 30 días. En España, insiste, hay una ley que establece ese plazo en 60 días, pero "a mí me pagan los tubos míos a 240 días, ocho meses".

Respecto a la agilización de las obras públicas anunciadas por parte de las administraciones públicas para generar empleo, Mariño afirma que les puede beneficiar, pero "se necesita hacer el proyecto y sacar la obra, y todo eso lleva tiempo; creo que empezará a funcionar en verano y nosotros necesitamos soluciones ya, porque nosotros y nuestros empleados tenemos que comer todos los días". Por todo ello tienen la intención de plantear estas cuestiones a la consejera de Economía para intentar buscar una salida, porque "este Gobierno lo ha hecho fatal", señaló.